Ahora, estamos por enfrentar una grave ofensiva de la empresa contra el sindicato. Así la consideramos nosotros, pues luego del movimiento por la independización y democratización del sindicato se han obtenido importantes conquistas económicas y mejoras en las condiciones de trabajo en la fábrica. Hay directivos del Grupo Modelo que no están conformes con los cambios que se han operado en el sindicato y en la empresa y están haciendo todo lo posible por dar marcha atrás en ese proceso de democratización e independización del sindicato, todo con tal de que no les signifique nuevas conquistas económicas para los trabajadores.

Por otro lado, el gobierno del estado se encuentra muy preocupado con la lucha del sindicato vidriero, pues se ha convertido en un ejemplo para los trabajadores de otras fábricas de la zona industrial de San Luis Potosí. Quieren acabar con ese "mal ejemplo", que también está poniendo en serios riesgos los intereses de los líderes cetemistas y de otras centrales corporativas minoritarias en el estado.

Por eso nos preocupa la posible construcción de una nueva empresa vidriera en Piedras Negras, pues con un sindicato charro —o de plano blanco— lograrán condiciones económicas ideales que podrían significar el desplazamiento de la producción de San Luis a otras plantas, en particular a esa fábrica en el norte del país.

Concretamente, la ofensiva consiste en la decisión de enfriar uno de los hornos más grandes de la fábrica, del cual depende la producción de más de un millón y medio de botellas diarias (en toda la fábrica se producen diariamente cinco millones de botellas). Han dicho que esta medida se prolongará durante "muchos meses" a partir de la segunda semana de enero y que se debe a la disminución de las ventas del Grupo Modelo en Estados Unidos, por la actual recesión de su economía. La medida podría implicar el despido de cientos de trabajadores. Actualmente, en la fábrica laboran más de 820 sindicalizados.

Nosotros creemos que este argumento es falaz y que en realidad buscan golpear al sindicato, desmoralizar a sus integrantes y provocar una reacción política conservadora en ellos, contraria al actual carácter democrático, independiente y combativo de su agrupación.

Lamentablemente, el sindicato deberá enfrentar esta difícil situación con finanzas sumamente débiles, pues se trata de una agrupación prácticamente de reciente nacimiento y cobra cuotas muy pequeñas, que son herencia de la anterior fase cetemista en la que el sindicato prácticamente no existía.

Por eso nos veremos obligados a solicitar ayuda a diversas organizaciones para dar esta lucha tan importante para la supervivencia de nuestra organización. Creemos en la importancia de la difusíon de este problema que estamos viviendo y en los apoyos que podamos tener de distintas organizaciones sindicales.